agosto 02, 2012

Panchito Robalino nos escribe desde Los Teques (VENEZUELA)


 Un cevequiano en Caracas:
participante del curso taller de acompañantes de Ejercicios

Fue el 25 de junio, luego de un corto viaje desde Quito que llegaría mucho antes del medio día a Caracas.
¿El motivo?, participar del XII Curso taller internacional de acompañantes de Ejercicios Espirituales, una iniciativa de la CPAL en convenio con la Provincia Venezolana de la Compañía de Jesús y el CEP (Centro de Espiritualidad y Pastoral). Serían cinco semanas de intensa actividad para aprender sobre el legado de Ignacio de Loyola y su práctica.

Los temas incluían cada una de las semanas de los Ejercicios, además de otros muy puntuales: Elección, Didáctica de los EE., Ambientación musical de la vivencia espiritual, Reglas de 1º y 2º semanas, Reglas para sentir con la Iglesia, Discernimiento ignaciano, Escucha y conversación espiritual, y Psicología y Ejercicios.

Fue un grupo de alrededor de 40 personas, laicos y religiosos, provenientes de varios países: Argentina, Chile, Brasil, Bolivia, Colombia, Puerto Rico, República Dominicana, Cuba, Guatemala y Ecuador, quienes participamos de esta dinámica. Nuestra delegación ecuatoriana, era, luego de la anfitriona, la más numerosa: Luis Quimís (joven profesor de la U. E. Javier, Guayaquil), José Terán (profesor del Colegio San Gabriel, Quito), P. Juan Cavanna, S.I. (Secretariado de Espiritualidad, Quito), P. Ernesto Vásconez (PUCE, Quito) y yo (U. E. San Luis Gonzaga).

La metodología era muy exigente. Clases magistrales en la mañana. En la tarde, trabajo personal y comunitario. En la noche experiencia significativa y película. Y todo esto de lunes a sábado al medio día. El resto del tiempo apenas y nos quedaba para conversar con el resto de participantes, hacer algo de turismo de medio día, arreglar las habitaciones, ocuparnos de nuestra propia ropa y otras tareas domésticas como lavado y secado de platos, que lo hacíamos por grupos. Nuestra meta era conformarnos como una comunidad.

¿Qué me queda de esta experiencia luego de haberla completado?
La riqueza de la diversidad que pude vivirla durante esas cinco semanas; el lenguaje común que significa la espiritualidad ignaciana pese a los diferentes contextos humanos y sociales; la interiorización y la profundización en los Ejercicios que espero sirvan para acompañar más y mejor a las personas con las que comparto en el Gonzaga y en la CVX.

¿Cuáles son los retos al futuro?
Servir mejor a través de las actividades que realizo con frecuencia (habrá que discernir el bien más universal, el mayor fruto…) y procurar dejarme guiar por Él.

Por: Francisco Javier Robalino
(Comunidad Dios Amigo, Quito)

Para más información se puede visitar los links de los informativos semanales del encuentro que fueron publicados:
http://es.scribd.com/doc/99956770/2º-Boletin-CEP-Curso-Internacional-de-EE
http://es.scribd.com/doc/100932762/4º-Boletin-CEP-Curso-Internacional-EE

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.