diciembre 01, 2010

PRIMERA EXPERIENCIA CON LA MISA DE NIÑOS


Durante mucho tiempo habíamos estado tejiendo esta idea. Motivados por un lado por las comunidades de parejas que nos pedían hacer algo para que pudieran traer a los niños a la misa, sin que supusiera un momento tedioso para los pequeños y una tensión para los padres que no sabían cómo hacer para no molestar con gritos y juegos a los adultos que concentrados escuchaban el evangelio…había algo que hacer para que la eucaristía sea un lugar que convoque a grandes y pequeños.


Nuestra decisión fue lanzarnos a la experiencia. La vocalía de vida comunitaria, animada por la idea y con el trabajo de un equipo que realmente se involucró con esta idea preparó la primera misa para niños.

El 21 de noviembre, que coincidió con el tema de Cristo Rey, tuvimos la primera aventura con este tipo de eucaristías. Tal vez, en primer momento causa resistencia el cambio horario, el cambio de rutina, lo inesperado…pero el sentir que puede haber un espacio familiar en nuestras eucaristías y que los niños captan mucho mejor a un Dios cercano que les habla desde su pequeña experiencia, con sus amigos de juego o en sus capacidades de comprender la vida desde su sencillez, nos sigue motivando a hacer con ellos muchos otros espacios de este tipo, donde la FAMILIA CVX sea la protagonista.

Esa primera eucaristía fue planeada pensando en que los niños no tienen por qué vivir separados de la misa común y corriente, muchos padres han llevado a sus niños a parroquias y otros sitios donde esperan que los niños tomen la enseñanza de ir en familia, pero a la vez, pensamos en que era importante crear un espacio de mayor cercanía para los pequeños. La metodología fue sencilla: iniciar con una oración conjunta, al momento de las lecturas trasladar a los niños a otro ambiente donde entendieron el evangelio con una función de títeres que les transmitió la idea de Cristo Rey y elaborar una manualidad con el equipo de CVX para presentarlo en el ofertorio. A partir de este ofrecimiento, donde el padre Vicente Chong participó preguntando a los niños sobre lo aprendido, los niños compartieron con sus familias el resto de la eucaristía.


Agradecemos de corazón a quienes participaron, les animamos a los que no estuvieron y que son padres a vivir la experiencia, y a los adultos que no tienen hijos pequeños, también les invitamos a experimentar una nueva forma de encontrar la palabra de Dios y de apoyar a que los niños tengan desde ya la oportunidad de formarse para ir creciendo en la fe. Y satisfechos por lo realizado, el CSR-Quito y Manta sigue comprometido a fortalecer este espacio y vincular a las familias que sientan importante seguir con este trabajo. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.