Me siento llamada a compartir con ustedes las mociones y los frutos del Curso de Guías CVX 2007, en su etapa intensiva, que se realizó en Machachi, del 17 al 19 de febrero, con laparticipación de 20 personas, entre participantes y expositores.Comienzo expresando nuevamente mi agradecimiento a quienes participaron y a quienes trabajaron intensamente para el suceso del evento. Vale decir: Consejo Regional Quito (PacoBonilla, Lorena Pérez e Isabel Andrade), Comisión de Formación del CSR Quito (Pe.Fernando Ponce SJ, María Angélica Lewin, Santiago Zárate y Maricarmen Mora), las excelentes dinámicas de Carolina Barahona, la grata presencia de Pe. Juan Caballero y de nuestro Presidente, Alberto Dávila. El sentir latinoamericano se hizo realidad con valioso aporte de Macarena Meneses de CVX Chile. Además, resalto la importante participación de los miembros de CVX Guayaquil, y de Christian Ubilla nuestro expositor invitado.
Esta iniciativa nació de un grito de la CVX Nacional y de la necesidad de hacerla crecer en cantidad y calidad. Estamos llamados a ser protagonistas de nuestra historia en CVX y, a democratizar y desmitificar la experiencia de ser guías laicos de comunidad.
El Guía debe ser un servidor. Esta misión se fundamenta en la respuesta a un llamado a toda y a todo aquel que desea, de forma generosa y abierta, servir a la CVX. Desde luego, para eso se necesita la unión de los quereres, primero el de Dios, que nos llama a través de su gracia y, segundo, el deseo y el querer de uno mismo. En definitiva, es un compromiso personal e intransferible. Luego, el llamado nos lleva a la acción, que es el hacer posible elReino de Dios aquí y ahora, en los distintos campos de nuestras vidas, en la comunidad y en toda CVX.
Como guías debemos estar atentos y atentas a los signos de los tiempos, y dispuestos a servir a la Iglesia y en la Iglesia, buscando a través del discernimiento constante la voluntad de Dios en nuestra vida y en la vida de la comunidad, por ello la importancia de la continua capacitación metodológica y la profundización de los valores de fidelidad y compromiso con Cristo, la CVX y la comunidad que guiaremos.
Debemos estar dispuestos a practicar la humildad en el ejercicio de la misión. Estaremos abiertos a escuchar, a pedir consejos en los momentos de dificultad y de duda, a ayudar incondicionalmente, a renunciar, a dar sin medida, para así facilitar el crecimiento de la fe ydel estilo de vida CVX de quienes orientaremos. Sólo estando abiertos y disponibles haremos posibles los deseos de Dios. Como lo dijo Macarena Meneses de CVX Chile en su hermoso compartir, muchas veces uno propone y Dios dispone.
Por último, como guías debemos aprender a trabajar en Equipo. El intercambio de experiencias sin duda alguna nos dará mayores capacidades para ofrecerlas a los demás.
Finalmente, me despido compartiendo mis sentimientos de alegría y regocijo por el compartir Nacional, Latinoamericano y Mundial de esos tres días.
Hemos podido ver que el camino es largo, pero con fe y esfuerzo lo construiremos.
Hemos asumido varios compromisos: el de continuar con las etapas extensivas del Curso, formar un Cuerpo de Guías para hacer posible el crecimiento de la CVX. Y al final, el grancompromiso de ser guías de una comunidad para de este modo servir al Señor a través de esta vocación, para en todo y en todas(os) más amar y servir.
Con cariño,
Marielle de Almeida Cunha Bonilla
Vocal de Formación CEN Ecuador
olá Marielle,
ResponderEliminara paz!
tudo bem com vocês?
Que legal o curso de assessores que vocês fizeram aí no Equador. Você poderia me enviar o programa dele?
Um grande e saudoso abraço,
Fernando.
ps este final de semana estarei dando um seminário do eneagrama e quem estará vindo de Vitória pra fazê-lo serão o Alexandre Viana e a Valéria. Ela é sua prima, né?